Tortitas americanas con jarabe de arce y mantequilla

Las tortitas americanas son toda una deliciosa. Descubre cómo prepararlas con auténtico jarabe de arce y mantequilla.

Tortitas americanas

Ingredientes

  • 200 g de harina de trigo
  • 10 g de levadura química
  • 2 huevos
  • 1 vaso grande de leche entera
  • 2 cucharadas grandes de azúcar
  • 30 g de mantequilla
  • Esencia de vainilla (al gusto)
  • 1 cucharada de aceite 
  • Una pizca de sal

Preparación

En un cuenco grande tamiza la harina junto con la levadura, una pizca de sal y el azúcar, y mézclalo todo bien hasta que se integre. Luego en otro cuenco añade los huevos, la leche y la esencia de vainilla, y bátelo todo muy bien.

En el cuenco donde se ha mezclado la harina haz un hueco en el centro y vierte la mezcla de leche y huevos. Luego, con la ayuda de unas varillas, remueve todo bien hasta que se integren los ingredientes.

Justo cuando hayas acabado de mezclar añade la mantequilla y vuelve a batir nuevamente, hasta que obtengas una mezcla lo más homogénea posible. Cubre ahora el cuenco con un poco de papel film y reserva en la nevera durante 40-60 minutos.

Pasado este tiempo pon la sartén antiadherente al fuego (a temperatura media), y justo cuando esté caliente vierte una pequeña porción de la masa en el centro. Deja que se cuezan durante algunos minutos. Cuando comiencen a salir burbujas pequeñas en la superficie de la tortita es el momento ideal para darle la vuelta. Voltéala con cuidado y cuece por el otro lado durante algunos minutos más. Repite la operación hasta que termines con toda la masa.

Al momento de servirlas, si lo deseas, puedes añadir tres o cuatro tortitas, una encima de la otra, y verter por arriba un poco de jarabe de arce. ¡Deliciosas!. Y si las quieres hacer aún más americanas, puedes añadir un trocito de mantequilla encima, para que se funda.

Cómo hacer unas tortitas americanas

¿Qué son las tortitas americanas y por qué son tan populares?

Las tortitas americanas son uno de los desayunos más populares de Norteamérica, de donde precisamente proceden. Básicamente consiste en una especie de pan plano, de forma redonda, cuya masa base se elabora habitualmente con harina, levadura, mantequilla, huevos, azúcar y sal. También, opcionalmente, se suele añadir esencia de vainilla, o extracto de canela molida.

Debemos diferenciarlas de los crepes en que su tamaño es relativamente más pequeño (10 centímetros aproximadamente frente a los 15-16 centímetros que habitualmente suelen tener los crepes). Además, llevan levadura por lo que su consistencia es más esponjosa y gruesa, y tienden a cocinarse a fuego medio, hasta que se doran.

En Estados Unidos y Canadá es común cubrirlas con abundante jarabe de arce, aunque es cierto que existen muchas opciones y variedades: desde frutas a nata montada, pasando por caramelo, dulce de leche, mermelada o miel.

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