Una crema que resulta muy refrescante por el sabor que le aporta el limón. Se sirve fría y es un postre ideal para estos días de calor. Es un postre sencillo de hacer que en poco tiempo tendrás preparado, con un resultado realmente particular.
También podemos degustarla en cualquier momento del año en que este postre apetezca.
Ingredientes
- 2 limones rallados (solo las partes amarillas)
- El jugo de esos 2 limones
- Medio litro de zumo de manzana sin pulpa
- 50 ml de miel de azahar u otra miel
- 6 hojas de gelatina
Elaboración
Comenzamos poniendo a hidratar en agua las hojas de gelatina. Lavamos bien los limones, quitamos la piel procurando solo coger las partes amarillas. Exprimimos los limones para obtener su jugo. En un cazo ponemos el jugo de manzana, el jugo de los limones y las pieles.
Calentamos sin dejar que llegue a hervir. Quitamos las pieles de los limones. Poco a poco vamos añadiendo la miel sin dejar de remover para mezclar bien. Retiramos del fuego.
Escurrimos bien las hojas de gelatina que tenemos hidratando en agua. Ponemos la gelatina en la mezcla anterior y la disolvemos. Dejamos reposar una hora.
Ponemos la mezcla en el vaso de la batidora y batimos hasta conseguir una crema suave. Repartimos la crema de limón en copas o vasos de postre individuales y reservamos en el frigorífico 2 horas.
Receta original de Teresa Ortiz Suarez.
