Ingredientes
- 100 g de harina
- 1/4 l de leche
- 2 huevos
- Pimienta blanca molida
- Sal
- Aceite de oliva (puedes sustituir por mantequilla)
- Opcional: perejil picado finamente
Preparación
En un cuenco grande pon todos los ingredientes, mezcla bien. Si lo deseas, puedes añadir a la masa un poco de perejil picado finamente. Pásala luego por un colador, para dejar en él los grumos que se puedan formar.
Ahora vamos a cocinar los crepés salados. Para ello pon un poco de aceite en la sartén o mantequilla, y cuando esté caliente o derretida, echa la masa suficiente para cubrir el fondo con una capa fina (evitando llenar demasiado, ya que entonces se formarán tortitas en lugar de la masa fina de los crepés).
Cuece cada masa alrededor de 1 minuto, hasta que la parte de abajo se encuentre perfectamente tostada.
Con la ayuda de una paleta de postre o de cocina despega los bordes de la sartén, dale la vuelta con cuidado y cuece por el otro lado durante 25-30 segundos.
Saca la crepé del fuego, y vuelve a hacer lo mismo una a una, con el resto de la masa.
¿Con qué podemos acompañar los crepés salados?
La masa de crepés salados es tan versátil que brinda la posibilidad de comerla con una amplia diversidad de ingredientes igualmente salados. Por ejemplo, pueden consumirse solos y acompañarlos directa y únicamente con una maravillosa ensalada.
O, bien, los champiñones cocidos y el queso mozzarella o azul combinan aún mejor cuando rellenamos la masa de los crepés.
No obstante, si prefieres una opción aún más sencilla que gusta también a los más peques de la casa, puedes optar por rellenarlos con jamón cocido y queso. ¡Exquisitos!.
