¿Te encanta la lasaña tanto como a nosotros? Se trata de una típica receta italiana que combina pasta con carne molida, salsa de tomate casera y toneladas de queso derretido. Pero si sigues algún tipo de dieta baja en carbohidratos, o no puedes consumir gluten, es cierto que las lascas de pasta que se convierten en el pilar de este plato hacen que sea imposible comerlo.
Para sustituir la pasta lo único que necesitamos es un ingrediente que proporcione una estructura similar, y el calabacín funciona a la perfección en este sentido. Sus rebanadas largas y gruesas, con la misma forma y un tamaño similar a la pasta, harán que la lasaña se calabacín destaque como una opción tan apetitosa como exquisita.
Gracias a ello, nos encontramos ahora ante una receta baja en carbohidratos, cien por cien libre de trigo y sin gluten, lo que hace a su vez que sea mucho más ligera en calorías.
Ingredientes
- 4 calabacines
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 230 g de salsa de tomate
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1/2 taza de queso ricotta
- 1/4 taza de queso parmesano (rallado)
- 2 tazas de queso mozzarella (rallado)
- 1/2 cucharadita de orégano seco
- 2 cucharadas de albahaca fresca
- Sal al gusto
- Pimienta negra molida (al gusto)
Preparación
Comenzaremos pelando la cebolla, y luego córtala en cubitos. Pela también los dientes de ajo y pícalos muy finamente. Lava la albahaca fresca y pícala. Haz lo mismo con los calabacines, pero en esta ocasión córtalos en rodajas finas.
Precalienta el horno a 200 ºC.
En una sartén grande al fuego pon la cebolla picada y añade la cucharada de aceite de oliva. Cocina a fuego medio, removiendo con frecuencia hasta que las cebollas se hayan ablandado y comiencen ligeramente a caramelizarse.
Añade ahora el ajo finamente picado y continúa cocinado durante uno o dos minutos más, como mucho.
Agrega la salsa de tomate, la albahaca fresca, el orégano, la sal y la pimienta negra molida. Remueve un poco y continúa cocinando entre uno a dos minutos más. Luego retira del fuego y deja que se enfríe un poco.
Mientras la salsa se enfría, corta ahora el calabacín en capas finas, de forma similar a fideos. Una cortadora de mandolina podría ayudarte muchísimo con este paso. Añade un poco de sal, y colócalos en una rejilla durante unos 10 minutos aproximadamente. Esto ayudará a extraer parte del exceso de agua presente en la verdura. Luego, sécalos con la ayuda de una toalla de papel.
En una cacerola apta para horno unta un par de cucharadas de la salsa fría en el fondo. Coloca una capa de fideos de calabacín sobre la salsa, y luego una capa de queso mozzarella rallado.
Agrega ahora un par de cucharadas de salsa seguido de otra capa de fideos de calabacín.
Coloca unas cucharadas de queso ricotta encima, y repite el proceso hasta que hayas alcanzado la parte superior del plato. Es conveniente que, la capa final, deba ser de queso mozzarella cubierto con queso parmesano.
Introduce en el horno durante 35 a 45 minutos, o hasta que el queso se derrita y empiece a dorarse. Una vez cocinado, deja reposar entre 5 a 10 minutos, antes de servir.
Variación de la receta. Si deseas hacer una lasaña algo más fuerte, pero de calabacín, dora en la sartén con las cebollas y el ajo 450 gramos de carne molida magra. Luego simplemente continúa con los pasos hasta completar el plato.